Una decisión del Presidente de la República junto a la de un Alcalde y, posteriormente, a la de una Vicealcaldesa, se ha constituido en la ignominia municipal de La Vega. En efecto, el pasado 16 de agosto el Presidente Luis Abinader se juramentó para un segundo mandato constitucional, procediendo a designar algunos nuevos ministros. Resulta que, entre esas designaciones nombró Ministro de Deportes al Ing. Kelvin Cruz, Alcalde del municipio de La Vega.
El Alcalde Kelvin Cruz fue reelecto para un tercer mandato, con más del 70% de los votos, en las pasadas elecciones municipales de febrero del presente año. Al renunciar a su función municipal para convertirse en Ministro de Deportes, dejó vacante la posición. Conforme a la ley 176-07 de Municipios, en su Artículo 64, le correspondía a la Vicealcaldesa asumir la función de Alcalde, para lo cual sería juramentada por el Concejo de Regidores. Hasta ahí, todo parecía normal.
Sin embargo, luego de hacerse oficial la dimisión del Ing. Cruz a la Alcaldía, resulta que la Vicealcaldesa Amparo Custodio también renunció a su cargo. Al quedar desiertas ambas posiciones del ejecutivo municipal, se descubre que existe un vacío legal para llenar las vacantes. Esta situación inédita ha dejado a uno de los municipios más importantes de República Dominicana sin Alcalde legítimo.
En efecto, conforme al censo de 2022, el municipio de La Vega cuenta con 221,572 habitantes, siendo el 8vo. más grande de República Dominicana. Su condición de Cabecera de la Provincia de La Vega le confiere el privilegio de ser el asiento de las oficinas provinciales de diversas entidades del Estado. Para el presente año 2024 el ayuntamiento cuenta con un presupuesto de RD$ 500,028,700.00 (US$ 8,368,681.17), uno de los diez más voluminosos del país.
El Engaño del Presidente Luis Abinader.
Con la designación del Ing. Kelvin Cruz como Ministro de Deportes, el Presidente Abinader subestima la importancia de la estabilidad en la gestión municipal de La Vega. Su actuación ha generado un vacío de legitimidad y legalidad que atenta contra la gobernabilidad local en uno de los municipios más importante del país. Sin embargo, esta no es la única acción contra la democracia municipal que ejecuta la gestión Abinader.
En efecto, en el periodo gubernamental 2020 – 2024 se desarrolló una política de cooptación de alcaldes de partidos políticos de oposición para ser juramentados en el oficialista Partido Revolucionario Moderno (PRM). Esa práctica representó un engaño a los electores de decenas de Municipios y Distritos Municipales, quienes habían elegido a candidatos de oposición para dirigir sus localidades. La ignominia municipal de La Vega solo es una nueva modalidad de engaño.
El Engaño del Alcalde Kelvin Cruz.
Al momento de ser designado Ministro de Deportes, el Ing. Cruz iniciaba su tercer mandato como Alcalde de La Vega. Sin dudas, el electorado local había reeditado su confianza en este ejecutivo municipal. Si el Ing. Cruz deseaba pasar al Gobierno Central, como ha quedado evidenciado, cabe preguntarse: ¿No hubiese sido más honesto y respetuoso que el PRM hubiese presentado otro candidato a la Alcaldía en las pasadas elecciones municipales?
Aún más vergonzoso es verificar que desde el Ministerio de Deportes se pretende mantener el control de la Alcaldía de La Vega. En efecto, ante la laguna legal sobre el procedimiento de designación de un nuevo Alcalde, el Concejo de Regidores ha designado como Alcalde interino a un funcionario municipal cercano al Ing. Cruz. Como se muestra, su engaño ha cubierto ilegitimidad la gestión de uno de los municipios más relevantes del país.
El Engaño de la Vicealcaldesa Amparo Custodio.
Nada más vergonzoso que el argumento expuesto por la Vicealcaldesa Custodio, y su organización Partido Frente Amplio, para no asumir la Alcaldía, ante la renuncia del Ing. Cruz. Resulta que, en el comunicado de renuncia expresa que “ni directa ni indirectamente, me prestaré a despojar a los perremeístas, ni a los munícipes de La Vega, del cargo que escogieron y legítimamente les corresponde”. En ese argumento subyace una concepción eminentemente clientelar.
Ante su acto de irresponsabilidad, Amparo Custodio olvidó que la Constitución de la República y las leyes prevén la figura del Vicealcalde para sustituir al Alcalde, en caso de ausencia temporal o definitiva. Olvidó también que al juramentarse asumió el compromiso de cumplir con sus funciones. Olvidó igualmente que, como Vicealcaldesa, además de representar a los munícipes de La Vega, encarnaba el rol de un partido emergente y el papel de la mujer en la democracia local.
Un Alcalde Ilegítimo ante el Vacío Legal.
La ignominia municipal de La Vega ha develado un vacío legal en lo relativo a la sucesión del Alcalde. Resulta que, la ley 176-07 de Municipios, en el Párrafo I del Art. 64, remite el procedimiento a la Constitución de 2002. En el Art. 55 de la misma se establecía que el Presidente de la República designa al sustituto del Alcalde (Síndico) de una terna de su partido político. Ahora bien, en la Constitución del 2010 fue eliminada esa atribución presidencial, sin prever alternativa.
Ante esta realidad, solo se puede apelar al Párrafo II del Artículo 64 de la de 176 – 07. En el mismo se establece que, ante la renuncia del Vicealcalde o su incapacidad de ejercer la función de Alcalde, con carácter provisional la ejercerá el Secretario General u otro funcionario que designe el Concejo Municipal. Como bien referí anteriormente, el Concejo ya designó como Alcalde “interino” al Secretario General Joel Martínez, un hombre de confianza del Ing. Kelvin Cruz.
Aunque el nuevo Alcalde interino ha argumentado que solo estará hasta que el Presidente Abinader designe un Alcalde definitivo, eso no sucederá; la actual Constitución no contempla esa atribución presidencial. En La Vega habrá un Alcalde de facto durante los 3 años y 8 meses que restan del periodo. Esto marca uno de los referentes más negativos en la municipalidad dominicana, la cual ha estado transitando en los últimos años un sendero de engaños, deslealtades e ilegitimidad.